20. Construcción de canales y vías fluviales
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1. Descripción del ámbito de actividad
2. Impacto ambiental y medidas de protección
2.1 Generalidades
2.2 Obras fluviales
2.2.1 Objetivo de las obras fluviales
2.2.2 Dragados
2.2.3 Espigones y muros de encauzamiento
2.2.4 Consolidación de las márgenes
2.2.5 Construcción de diques de contención
2.2.6 Umbrales, represas, presas (aisladas o en relación con esclusas y centrales eléctricas fluviales)
2.2.7 Rectificación de cauces o canalización
2.3 Construcción de canales
3. Análisis y evaluación del impacto ambiental. Valores de referencia.
4. Relaciones con otros ámbitos de actividad
5. Evaluación sinóptica de la relevancia ambiental
1. Descripción del ámbito de actividad
Con la expresión construcción de canales y vías fluviales se designa el conjunto de obras de construcción que producen cambios determinantes del régimen hidrológico natural en los cursos de agua corriente o en sus márgenes, o en una región afectada por la construcción de un canal.
Las obras fluviales abarcan todas las construcciones hidráulicas en el marco
- de la regulación de los ríos,
- de la protección contra crecidas,
- de la modificación del uso de las aguas,
- de la mejora de las condiciones para la navegación y
- de la canalización de cursos naturales.
La construcción de canales abarca obras como la construcción de
- vías fluviales artificiales (vías fluviales interiores/canales de navegación interiores),
- canales de abastecimiento y de evacuación o canales de crecida y de irrigación,
- grandes canales para la navegación marítima (p. ej. el canal de Panamá o el canal de Suez) y
- entradas artificiales a puertos interiores.
Las construcciones fluviales se realizan generalmente - dependiendo del tamaño de la corriente de agua - con carácter multifuncional, es decir, para cubrir diferentes necesidades como, p. ej., aquellas referentes a tráfico, energía, riego y suministro de agua, a la protección contra las crecidas y al mantenimiento o la modificación de los niveles freáticos existentes en los bajos de los ríos.
Los canales se construyen igualmente como obras hidráulicas para fines de tráfico y de obtención de energía, pero también con fines de abastecimiento y evacuación (un ejemplo de gran canal de abastecimiento es el de Bahr El Youssef para el aprovisionamiento del oasis Fayoum en Egipto). La construcción de canales y vías fluviales puede cumplir, por lo tanto, funciones de aprovechamiento y protección.
En los canales, el nivel del agua se mantiene generalmente constante o es modificado dentro de límites definidos. Por lo tanto, los canales, salvo pocas excepciones, no son "aguas corrientes" sino "zonas de aguas quietas". Debido a las pérdidas inevitables por infiltración y evaporación, a menudo tienen que ser "alimentados" artificialmente (p. ej., la presa del valle del Eder) para el Canal Mittelland).
Si el nivel de agua de los canales es más alto en algunas zonas que el terreno natural, o si el canal discurre a lo largo de un declive, debe prestarse atención especial a la impermeabilidad del canal y a la seguridad contra fracturas del fondo, a fin de evitar riesgos de inundaciones.
2. Impacto ambiental y medidas de protección
2.1 Generalidades
Las obras fluviales y de canales afectan a la totalidad del medio ambiente.
Aparte de los impactos directos, se producen efectos indirectos o secundarios fuera de la zona de influjo de las propias obras de construcción.
Este es el caso, por ejemplo, de las obras en los cursos altos de grandes ríos, las cuales pueden provocar de forma directa y/o indirecta impactos hasta las zonas de estuario de la desembocadura y hasta aquellos dominios paisajísticos relacionados con el río a través de las capas acuíferas. Así, p. ej., los cambios de velocidad de flujo afectan en algunos casos negativamente al contenido de oxígeno y con ello a la capacidad de autodepuración mediante microorganismos de un curso de agua corriente. Por otra parte, estos microorganismos son la base para el desarrollo de una flora y una fauna ricas en especies y éstas lo son, a su vez, otros seres vivos superiores de la cadena alimenticia.
2.2 Obras fluviales
2.2.1 Objetivos de las obras fluviales
Las obras fluviales se llevan a cabo normalmente por razones económicas; están sujetas a exigencias muy complejas con respecto a los efectos que se pretenden alcanzar y a aquellos no deseados que tienen que ser aceptados. Así, p. ej., las modificaciones producidas por construcciones fluviales en humedales o en zonas de crecida alteran la flora y fauna de estas zonas y las posibilidades de vida de diferentes especies. Estos cambios pueden generar ventajas locales considerables, p. ej., a nivel humano y de explotación, y son justificables siempre y cuando las especies vegetales y animales desplazadas encuentren suficientes posibilidades de asentarse en las zonas vecinas, de tal forma que se mantenga una gran diversidad de especies.
Por este motivo, las obras de construcción fluviales y de canales se enfrentan generalmente a un conflicto de uso y deben ser planificadas y realizadas intentando conseguir un equilibrio de intereses tan amplio como sea posible.
Dado que para alcanzar diferentes objetivos se pueden realizar las mismas o parecidas obras fluviales, a continuación se describe cada una de ellas junto con las principales soluciones a través de medidas de construcción fluvial.
2.2.2 Dragados
Las obras de dragado (temporales o continuas, para conseguir o mantener una profundidad determinada) afectan al medio ambiente natural, por un lado, al transformar los perfiles transversal y longitudinal del río, lo que normalmente conlleva cambios en el comportamiento de la corriente y, por otro lado, por las alteraciones en los alrededores del río, si el fango extraído se tiene que almacenar fuera del lecho fluvial. Además pueden producirse cambios en el nivel freático si los niveles del agua sufren variaciones duraderas.
Los cambios en el comportamiento de la corriente pueden, p. ej., dar lugar a peligros de inundaciones en el curso inferior de un río al aumentar la velocidad de la corriente en el curso medio. Al destruir o alterar determinadas formaciones del lecho, el dragados puede tener como consecuencia la aparición de fenómenos de erosión que podrían afectar negativamente el objetivo perseguido.
El depósito del lodo a los lados del río conlleva - según su consistencia - cambios de la flora y fauna, así como de las formas naturales del terreno. El material dragado contaminados (procedente de la contaminación del agua del río y, por lo tanto, de las acumulaciones a extraer) debe ser almacenado en depósitos para residuos peligrosos, teniendo cuidado de proteger las aguas subterráneas.
El almacenamiento incorrecto de los lodos de dragado, especialmente de aquellos contaminados, puede afectar de forma perjudicial a los seres humanos a través de alteraciones de la flora y fauna.
2.2.3 Espigones y muros de encauzamiento
Los espigones y muros de encauzamiento tienen como fin normalmente la construcción artificial de determinados perfiles de flujo o de un determinado recorrido longitudinal con el objetivo de mantener ciertas velocidades o direcciones de flujo y profundidades del agua ante caudales de volumen bajo o medio.
Estas construcciones afectan al comportamiento natural de flujo de la corriente con el ya citado riesgo de erosión - siempre y cuando se modifique el nivel freático - y también a las tierras bajas de las orillas (vega) del río (deterioros por humidificación o desecación con los correspondientes impactos sobre la flora y fauna; zonas naturales de orilla, normalmente irregulares, sufren por lo general alteraciones).
En general representan un medio óptimo para conseguir profundidades adecuadas para la navegación y determinadas direcciones de flujo con el menor impacto ambiental posible. A menudo, mediante la construcción de espigones y de muros de encauzamiento se puede prescindir de otras obras fluviales o, p. ej., de dragados.
2.2.4 Consolidación de las márgenes
Las obras de consolidación de márgenes se realizan frecuentemente por razones reotécnicas antes o después de presas, represas o esclusas para barcos (en el último caso a veces también se llevan a cabo consolidaciones del fondo) y sirven para evitar la erosión y los denominados procesos de socavamiento. Por lo general consisten en escombros de obras hidráulicas, los cuales se colocan sobre bases geotextiles de afianzamiento (como lecho) con el objeto de evitar arrastres por lavado por la parte posterior o por debajo. En algunos casos pueden consistir en recubrimientos bituminosos o en los denominados encachados.
Los recubrimientos bituminosos o los encachados ocasionan impactos en el medio ambiente fundamentalmente debido a su impermeabilidad, como consecuencia de la interrupción parcial del intercambio de agua entre el río y las capas acuíferas. Sin embargo, estos impactos deben calificarse como bajos, ya que el intercambio hídrico se mantiene a través del fondo.
Impactos considerables se producen respecto a la flora y la fauna de las márgenes, las cuales normalmente son desplazadas por las obras. Como consecuencia de la fuerte modificación de las orillas por obras, se pueden destruir, p. ej., lugares de desove para los peces, las ranas y los sapos.
Un río orillado por márgenes consolidadas produce a menudo un efecto negativo en los seres humanos debido a su aspecto artificial. Sin embargo, los efectos positivos como, p. ej., la disminución del peligro de fractura de las márgenes o de erosión, facilitan condiciones de vida más seguras en las orillas de los ríos.
2.2.5 Construcción de diques de contención
El objeto de la construcción de diques es la protección contra las aguas de crecida.
Su efecto sobre el medio ambiente natural es, por un lado, impedir inundaciones de grandes zonas de vega - eventualmente habitadas - y, por otro lado, afectar el comportamiento del flujo de la corriente del río durante las crecidas. La desaparición de las inundaciones de superficies agrícolas en las vegas fluviales tiene como consecuencia, entre otras cosas, considerables alteraciones del régimen de humedad del suelo y no se produce el "efecto fertilizante" por acumulación de sustancias en suspensión después de las inundaciones (y según los casos debe ser compensado artificialmente). Ambos hechos ejercen influencia sobre la flora y fauna naturales de una zona de vega.
Los tramos de río con diques de contención actúan como tramos canalizados respecto a las aguas de crecida descendientes, con la consiguiente aceleración de descenso de la corriente, la posible erosión del lecho del río y el peligro de inundaciones en zonas desprotegidas del curso bajo.
Los diques de contención actúan también como barreras frente a la escorrentía superficial natural de las zonas de vega hacia el río. Por esta razón, en el tramo inferior, cercano al mar, de un río, donde los diques de contención son por lo general imprescindibles debido a las posibles mareas vivas, las superficies situadas detrás del dique tienen que ser drenadas artificialmente.
Estas construcciones afectan de forma decisiva tanto a la fauna y flora terrestres como a las acuáticas. Así, los cambios en el régimen de humedad dan lugar a cambios en los biotopos de plantas y animales de todo tipo. El rápido descenso de las aguas de crecida en los tramos de dique destruye los lugares especiales de desove y de cría en zonas de aguas tranquilas.
De forma indirecta, como consecuencia de efectos negativos como altas velocidades de la corriente y eventualmente erosión del fondo y de las orillas, pueden producirse perjuicios para la navegación y la pesca.
La agricultura puede sufrir pérdidas considerables como consecuencia de las citadas modificaciones de la humedad del suelo y de la ausencia de los limos fluviales.
Los diques de contención dificultan el acceso libre a las aguas y deben ser operados y mantenidos cuidadosamente a fin de evitar peligros de rupturas.
Aquellos diques que, en casos especiales, para la protección contra la rompiente o el embate de las olas están consolidados con piedras o sustancias bituminosas, alteran también el paisaje.
2.2.6 Umbrales, represas, presas (aisladas o relacionadas con esclusas y centrales eléctricas fluviales)
Los umbrales, las represas y las presas menores se construyen, generalmente, para mejorar la navegabilidad de los ríos y para aprovechar la energía hidráulica, pero también por razones de manejo de recursos hídricos.
Las presas pueden construirse para la regulación de los niveles de agua y de los caudales, fijas o con rebosaderos o tapaderas móviles. Se construyen en combinación con esclusas para barcos y/o con centrales hidroeléctricas, o acopladas a edificios de distribución para la desviación hacia canales, generalmente de irrigación.
Los umbrales o las represas de poca altura provocan de pequeñas a medianas modificaciones de la pendiente de circulación. Todos los efectos de tales obras son proporcionales a su tamaño y, a fin de simplificar, se explican a continuación en base a los efectos de las presas:
Las presas representan una intervención considerable en el régimen de circulación de un río y lo dividen en un tramo de corriente superior y un tramo inferior, los cuales están exactamente separados por la construcción. De esta forma se interrumpe el transporte de detritos de arrastre y otros sedimentos. Debido a la división en dos y como resultado de la elevación del nivel de agua en el tramo superior de la corriente, se producen sedimentaciones en esta zona. En el tramo inferior aumentará, debido al incremento de la fuerza de arrastre del agua (sin sedimentos), la extracción de sedimentos, es decir, la erosión del fondo y de las orillas de río se intensificará.
En el tramo superior del río y hasta el comienzo del remanso se altera el nivel freático de los terrenos de ribera a consecuencia de la elevación del nivel de agua. A menudo esto hace necesario construir diques de contención alrededor de estos terrenos para impedir inundaciones en épocas de crecida (véase 2.2.5).
La alteración de velocidad de flujo de la corriente en la zona del embalse provoca una fuerte reducción de la capacidad de autodepuración del río, lo cual produce un deterioro de la calidad del agua, especialmente marcado en las épocas de estiaje.
La elevación del nivel freático tiene considerable influencia sobre la fauna y flora terrestres:
- Con la división del río en dos se impide la migración natural de los peces. Los pasos especialmente construidos para éstos sólo se pueden salvar de forma limitada.
- Las dificultades para acceder a las zonas de desove pueden ocasionar la extinción o desaparición del lugar de determinadas especies.
- A causa de la disminución de la velocidad de la corriente en el tramo anterior a la presa, puede ocurrir que
vuelvan a multiplicarse las plantas acuáticas;
surjan lugares de incubación para el mosquito de la malaria y otros insectos en las zonas de aguas tranquilas;
se establezcan caracoles en las orillas, los cuales sirven de huéspedes intermediarios de la bilharziosis (esquistosomiasis), con lo cual se extiende esta enfermedad;
se produzcan efectos sobre la flora y fauna acuáticas a consecuencia del anteriormente citado deterioro de la calidad de las aguas (reducción de la capacidad de autodepuración); esto puede conducir a la muerte de los peces por falta de oxígeno;
el sector pesquero resulte perjudicado;
dependiendo de las circunstancias, haya que tomar medidas especiales de protección contra aguas de avenida, ya que la presa produce una angostura de la sección de flujo y el reflujo de las aguas más arriba de la presa eleva el nivel de las mismas por encima del nivel de crecida originario;
para evitar la erosión en el tramo de la corriente posterior a la presa, se deban, según el caso, añadir artificialmente sedimentos y detritos de arrastre al río.
Los efectos directos para la población son generalmente positivos (seguridad en épocas de crecida, suministro de agua y energía). Los efectos negativos conciernen a las modificaciones del paisaje o a la situación sanitaria de la población. Ésta puede empeorar a causa de la propagación de transmisores de enfermedades. A este respecto debería realizarse a tiempo una campaña de información y sensibilización, dirigida sobre todo a las mujeres, tradicionalmente responsables de las cuestiones de agua e higiene.
2.2.7 Rectificación de cauces o canalización
La rectificación de los ríos se hace con diferentes fines y puede realizarse tanto por motivos de manejo de recursos hídricos como por razones de aprovechamiento.
Los efectos de una rectificación o canalización son diferentes dependiendo del tipo de obra. Hay que diferenciar entre las siguientes medidas:
- Acortamiento de un meandro conservando éste como un brazo muerto (agua tranquila o corriente con la función de evacuación durante las crecidas u otro tipo de uso). Una obra de este tipo se realiza con el objeto de obtener energía (aumento de la altura de caída) y/o para mejorar las condiciones de navegación.
- Rectificación y desplazamiento del curso del río sin mantener el lecho antiguo. Se trata de medidas de manejo de recursos hídricos con fines de protección contra inundaciones u otros peligros.
El corte de un tramo en el sentido mencionado tiene normalmente los siguientes componentes: trayecto de acortamiento, brazo muerto, construcciones de presa en el brazo muerto y en el trayecto de acortamiento para la elevación del nivel del agua en el tramo superior de la corriente, esclusa acoplada a una de las presas o transformación de una de las presas en una central hidráulica.
La canalización consiste por lo general en una combinación de rectificación fluvial (acortamientos de cauce) y ensanchamientos del lecho natural construyendo un perfil de flujo homogéneo (en interés de la navegación). Los impactos de las canalizaciones se tratarán en el apartado 2.3.
2.2.7.1 Acortamientos
Con el acortamiento se altera el flujo del río. La reducción del trayecto provoca un aumento de la pendiente del fondo y de la velocidad de la corriente en este tramo.
Sin la construcción de presas el brazo muerto se desecaría. La mayor velocidad de flujo puede dar lugar al descenso nivel de agua aguas arriba del corte, a una mayor erosión del lecho fluvial (aguas arriba y en el trayecto de acortamiento) y a sedimentación aguas abajo. Las crestas de avenida aumentan y provocan un mayor peligro de inundaciones aguas abajo.
Los niveles freáticos más arriba de la obra y en la obra misma se ven afectados. A largo plazo se produce una disminución de los niveles de las aguas subterráneas. El canal Jongley (acortamiento del Nilo Blanco de Malakal a Juba), p. ej., se construyó para a) reducir la duración del viaje en barco y b) aumentar la evacuación media diaria en un orden de 40 x 10 m3 (aproximadamente 460 m3/s) mediante el drenaje de las zonas pantanosas situadas al sur de Malakal.
Las obras de presa (presa con o sin esclusa para barcos en el tramo de acortamiento y central hidráulica en el brazo muerto o a la inversa, o aislamiento del brazo muerto respecto al tramo de aguas bajas y todas las construcciones en el trayecto de acortamiento) producen aguas arriba y aguas abajo los efectos ya expuestos en el apartado 2.2.6.
En la zona del tramo de acortamiento, los efectos sobre las aguas freáticas de los alrededores dependen de la localización de las construcciones (en el extremo superior o inferior del canal).
En el brazo muerto la calidad del agua puede cambiar, si no se prevé ninguna circulación mediante la comunicación con las aguas principales (p. ej., eutrofización = vuelco de las aguas a consecuencia de un fuerte enriquecimiento de sustancias nutritivas, excesivo crecimiento de algas y fuerte sustracción de oxígeno).
Los tramos de acortamiento sin presas provocan un fuerte impacto sobre la flora y fauna en la zona y en los alrededores del antiguo lecho fluvial (brazo muerto). A causa de la modificación de los niveles freáticos (el canal actúa como drenaje) la flora se verá con seguridad perjudicada, la antigua vegetación de orilla, cuyo crecimiento está limitado a zonas húmedas, desaparecerá. Como consecuencia de ello no pueden excluirse daños también en la fauna.
En los canales de acortamiento con obras de presa se producen aguas arriba y aguas abajo, efectos semejantes a aquellos de las presas. Además hay que contar con impactos negativos adicionales en la zona del brazo muerto:
- Si el brazo muerto se cierra, el agua puede sufrir eutrofización. En parajes tropicales, el jacinto acuático puede crecer hasta cubrir la totalidad de la superficie del agua con los perjuicios consiguientes para la fauna.
- Los brazos muertos constituyen buenos lugares para la incubación de insectos y de transmisores de enfermedades (enfermedades ligadas al agua y a vectores de transmisión).
- La población de peces puede experimentar un fuerte incremento, variando, sin embargo, las especies. Los peces de corrientes rápidas migrarán y aumentará el número de especies de aguas tranquilas.
La construcción de centrales eléctricas origina cambios en el caudal de corriente aguas abajo, a causa de lo cual se producen modificaciones en la fauna y flora (homogeneización de la corriente, la extrema agitación de las aguas determina oleaje y descenso del nivel, etc., véase el capítulo "Grandes construcciones hidráulicas"). Las propias turbinas pueden convertirse en una trampa mortal para los peces.
A causa del deterioro de la calidad del agua en el brazo muerto y de la presencia de agentes patógenos ligados al agua y a vectores de transmisión, la salud de la población está amenazada.
2.2.7.2 Rectificación del curso de agua
La reducción del trayecto de recorrido, p. ej. rectificación de los meandros, da lugar al aumento de la velocidad de flujo, con lo cual las olas de avenida descenderán con mayor rapidez. Esto tiene como consecuencia que
- los terrenos circundantes no son inundados, o no en la misma medida que antes y por lo tanto
se reduce la infiltración en las aguas subterráneas, disminuyendo la formación de éstas;
- se altera el nivel freático;
- se producirá erosión del fondo y de las márgenes en los casos en que no se construyan las correspondientes consolidaciones del fondo o encachados para la protección de las orillas;
- en la zona de la desembocadura o en trayectos con poca pendiente deben construirse diques de contención como protección contra inundaciones en casos de fuertes crecidas.
Las variaciones de los niveles freáticos afectan a la vegetación. A consecuencia de la desecación de superficies pantanosas varía la diversidad de especies vegetales.
La fauna también se ve perjudicada. La estructura de la población de peces puede alterarse a causa de la desaparición de zonas de desove, así como la diversidad de organismos como consecuencia de la destrucción de zonas de aguas tranquilas y modificaciones de las orillas.
El escaso peligro de inundaciones afecta, desde el punto de vista económico, positivamente a la explotación de los terrenos circundantes. El drenaje permite explotar económicamente zonas pantanosas. La agricultura puede incorporar amplias superficies gracias a la construcción de redes de drenaje y estaciones de bombeo, las cuales vierten al río canalizado. De esta forma, la flora y la fauna de los terrenos afectados cambian inevitablemente.
Además, con las medidas de regulación se altera el paisaje. La vegetación de la orilla, típica y característica del paisaje, desaparecerá.
Desde el punto de vista socioeconómico, la obra resulta positiva, pues las inundaciones y los deterioros en las zonas protegidas se reducen.
2.3 Construcción de canales
La construcción de canales y vías de navegación obedece por regla general a razones económicas, con el fin de conseguir posibilidades baratas de transporte o para la transferencia o evacuación de agua.
Los canales como comunicación entre mares o entre sistemas fluviales cruzan frecuentemente zonas en las que normalmente no existen importantes sistemas de aguas superficiales. Para salvar las diferencias de altitud, se tienen que construir esclusas o elevadores. Estas vías acuáticas artificiales tienen que ser alimentadas con agua, pues por evaporación, infiltración, esclusaje, etc. se producen pérdidas y el nivel de agua del canal tiene que mantenerse a una altura determinada a fin de que la navegación transcurra debidamente o para otros usos.
Los impactos que se producen resultan de la alimentación del canal con agua, si se trata de aguas estancadas, y de la realización del trazado.
Los canales afectan al régimen hídrico de una gran región. Así, puede ocurrir que:
- los niveles freáticos sufran alteraciones, ya que los canales tienen el efecto de grandes zanjas de drenaje;
- empeore la calidad del agua como consecuencia del vertido de aguas residuales y desechos por parte de los barcos.
Aparte de esto, pueden producirse cambios en el microclima a causa de la alteración del régimen hídrico, lo cual al mismo tiempo produce impactos secundarios.
Las rupturas de un canal en tramos terraplenados provocan destrozos considerables en el canal mismo y en los alrededores.
Las modificaciones del régimen hídrico de la zona tienen consecuencias para la flora y fauna terrestres. Puede darse la completa aniquilación de determinadas especies de plantas, es decir, la destrucción de humedales y su vegetación cuando, p. ej., para asegurar el abastecimiento del canal sea necesario drenar zonas pantanosas. Además, los canales interrumpen rutas migratorias naturales de la caza mayor y menor y pueden cortar hábitats.
En los humedales desecados tiene lugar un cambio del aprovechamiento, es decir, su transformación en superficies agrícolas o forestales, etc.
Asimismo pueden darse impactos negativos sobre todo en el paisaje a causa de la realización del trazado, de las obras de construcción necesarias, como tramos de dique, esclusas y elevadores de barcos, puentes sobre el canal o las vías públicas.
Aparte de esto, el peligro para seres humanos y animales por ruptura del canal (desbordamiento) o fractura del fondo en los tramos terraplenados o en los puentes es considerable.
Con el canal se interrumpen vías de comunicación tradicionales. Deben construirse puentes para caminos y vías que crucen el canal, sin embargo éstos no pueden eliminar por completo los problemas producto del corte. Por otro lado los canales pueden tener gran valor recreativo, para la práctica de deportes acuáticos.
3. Análisis y evaluación del impacto ambiental. Valores de referencia.
Hay que tener en cuenta que, especialmente en los ríos, en general, se pueden producir impactos a lo largo de todo el curso fluvial. Los canales, debido a su necesidad de alimentación, también provocan impactos de amplio alcance.
La cuantificación de los impactos ambientales y su valoración presentan problemas. Se pueden hacer descripciones cualitativas, pero éstas deben ser tan detalladas como sea posible a fin de que puedan ser comprendidas.
Debido a la complejidad de las relaciones y a la falta de conocimientos suficientes sobre los factores causales reales - un factor solo rara vez decisivo para un efecto - no se pueden excluir falsas interpretaciones. La comparación con los impactos de obras fluviales o de canales ya existentes que se encuentren en zonas, condiciones climáticas y topográficas similares puede ser un método de gran ayuda para poder hacer afirmaciones realmente relevantes. En este sentido es importante identificar los factores de importancia para los impactos en cada uno de los ámbitos ambientales y hacer reconocibles las relaciones entre las medidas y los efectos. Debe darse especial importancia a las cuestiones relacionadas con la protección de las especies, la modificación de biotopos y la variación máxima aceptable de los niveles freáticos.
4. Relaciones con otros ámbitos de actividad
Las obras fluviales y de canales están estrechamente relacionadas con aquellos ámbitos de actividad que originan una fuerte demanda de agua. A este respecto debe considerarse el derecho de aguas existente.
Sobre todo, hay que citar a la agricultura, la cual se ve afectada por todos los proyectos fluviales y de construcción de canales, sea porque utiliza los mismos recursos para riego, sea por el cambio de uso de la tierra o por el influjo sobre la vegetación terrestre o como consecuencia de efectos secundarios.
También hay que hacer referencia al abastecimiento de agua potable y de agua industrial. El suministro de agua, que juega un papel prioritario en vistas al desarrollo de una zona, tiene que incluirse siempre en la planificación, en todos los proyectos y ámbitos de proyecto. Sus intereses deben ser considerados con prioridad.
Relacionados con las obras fluviales y la construcción de canales están a menudo relacionados con componentes de proyectos de construcciones hidráulicas rurales o de grandes construcciones hidráulicas, así como de construcción de puertos.
Véanse los correspondientes capítulos "Construcciones hidráulicas rurales" y "Grandes construcciones hidráulicas", así como sobre el "Abastecimiento de agua". Deben tenerse en cuenta asimismo los capítulos generales referentes a la planificación.